Este martes, funeral por Ángel Ferrera en la Catedral

El pasado jueves se celebró en la parroquia de Santa Catalina una misa auspiciada por las tres hijas del empresario, que llevan meses con batallas judiciales con la viuda.

Esos contenciosos derivaron en la orden judicial que paralizó la incineración de los restos mortales para determinar si al empresario se le habían suministrado medicamentos u otras sustancias que pudieran acelerar su óbito.

Tanto el médico que certificó la muerte como el primer análisis del cuerpo en el Instituto de Medicina Legal acreditaron que murió por la metástasis cancerosa que padecía.

A Ferrera se le diagnosticó hace años un cáncer de pulmón y en los últimos meses se extendió al cerebro y los huesos. El paciente optó entonces por los cuidados paliativos, con supervisión médica continua.

En su testamento vital dejó escrito que su cuerpo fuese incinerado y las cenizas depositadas en el panteón de la familia Ferrera en un cementerio de la capital grancanaria.

Ángel Ferrera se casó en primeras nupcias con Margarita Alonso, con quien tuvo tres hijas, y que falleció en 2007. Con posterioridad, Ferrera se casó con María Tavío Gil, con quien vivió hasta su fallecimiento.