Satocan retoma la obra del búnker de radioterapia tras tres meses de parón

Fue casi coincidiendo con las pasadas fechas navideñas cuando quedaron paradas las obras de construcción del búnker de radioterapia en el Hospital Doctor José Molina Orosa de Arrecife; al considerarse necesaria una alternación relativamente sustancial en cuanto al hormigonado por parte de Satocan, la mercantil que está ejecutando los trabajos. Casi tres meses después, por fin este pasado martes se pudo recobrar la actividad, con lo que aún puede haber opción a que la iniciativa pueda estar completada antes de que acabe el año, con vistas a que puede entrar en funcionamiento en 2022, siempre y cuando antes se concrete el oportuno equipamiento por parte de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias.

Fuentes hospitalarias reconocieron ayer a este diario que se espera que se pueda recuperar parte del tiempo perdido entre la primavera y el verano. Por ello se mantiene la apuesta de tener el búnker para finales de 2020.

Las obras, adjudicadas por cerca de 2,16 millones de euros, contemplan el búnker, con áreas de apoyo técnico y de uso del personal; con dos consultas, salas de espera y área administrativa, con una superficie útil de 400 metros cuadrados, de un espacio construido de 538 metros cuadrados.

Se ejecutan las obras junto a parte de las dependencias administrativas de la Gerencia de Servicios Sanitarios, aprovechándose incluso el suelo donde estuvo el salón de actos, que fue derruido en noviembre. Una vez que entre en funcionamiento la nueva infraestructura no será necesario el traslado masivo de pacientes a Gran Canaria; con el consiguiente beneficio inmediato para la calidad de vida de éstos.

La necesidad del búnker se explica en que cada año se diagnostican de 500 a 600 casos de cáncer en Lanzarote. En el 50% de los casos hace falta dar tratamiento en el Hospital Doctor Negrín.

Retomadas las obras, la gerencia podrá dedicar un mayor nivel de esfuerzos al proceso encaminado a la adquisición de gases medicinales y sus accesorios correspondientes, para su empleo en diversos centros sanitarios. Para un periodo de dos años se cuenta con un presupuesto de casi 1,75 millones de euros, contando con los impuestos indirectos.

Para esta semana se ha previsto un encuentro, por vía telemática, para abordar propuestas; en base a los fundamentos de la licitación que se daba a conocer a finales del pasado ejercicio.

Por último, cabe comentar que aún está pendiente de firma e contrato con Zima Desarrollos Industriales y Climamur para las tareas destinadas a que se pueda estrenar a final de año la Unidad de Hemodinámica. Una vez que sea operativa, como en el caso de búnker, se contará con medios para evitar traslados a las islas capitalinas de pacientes con algún dolencia coronaria de relevancia. Será una sala multifuncional con personal cualificado ya destinado en Lanzarote.