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José R. Sánchez López
San Bartolomé
Viernes, 23 de agosto 2024, 22:57
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Casi coincidiendo con el amanecer de ayer viernes, de nuevo volvieron a quedar en servicio todo los carriles de la autovía LZ-2, a su paso por Playa Honda. Fue posible tras la aplicación de medidas correctoras supervisadas por la Consejería de Obras Públicas, Vivienda y Movilidad del Gobierno de Canarias; entidad que patrocina las faenas de colocación del puente subterráneo para mejorar los accesos a la localidad más poblada de San Bartolomé. Estas obras se espera que queden listas a finales de año.
Para reabrir el trazado al tráfico a tope de capacidad, en las horas previas se trabajó con intensidad para retirar toda la logística dispuesta bien entrado mayo, que sirvió para dejar un carril por sentido, mientras que los otros dos quedaban cerrados, a expensas de las obras del nuevo paso.
Fue posible mantener el tráfico en la LZ-2, con retenciones abundantes, especialmente en horas centrales diurnas; reduciendo su circulación a un carril por sentido en una longitud de unos 300 metros, mediante unos desvíos de calzada realizados por unos pasos de mediana ejecutados durante las obras. El mantenimiento de la circulación durante un periodo de tres meses, para el empuje de los dos cajones que componen el nuevo paso bajo la carretera, pudo ser posible gracias a la presencia de una pantalla de micropilotes en la mediana.
De ayuda también ha sido, en sentido hacia Tías desde Arrecife, el camino de tierra que sale de El Cable y permite el enganche directo con Playa Honda.
Y de gran valor, igualmente, ha sido la labor de los agentes de Tráfico de la Guardia Civil, así como del personal del Consorcio de Emergencias y de otros departamentos del Cabildo; cruciales para minimizar los efectos cuando se dieron percances, que provocaron retenciones que llegaron incluso a parar el tráfico en la circunvalación capitalina (LZ-3).
La financiación de las obras corre a cargo del Gobierno de Canarias. La adjudicación se dio a conocer a comienzos de 2023, a la mercantil Señalizaciones Villar, por 3,8 millones de euros; si bien hubo que esperar hasta el segundo semestre del pasado ejercicio para el arranque de las faenas, que van con retraso, si se considera que se llegó a anunciar que la instalación del paso sería posible en un plazo de seis meses.
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