La biblioteca de San Juan cambia de cara y se convertirá en un lugar accesible y seguro

Así, con el dinero asegurado, el área de Contratación ha sacado ya a licitación pública una ambiciosa obra, enmarcada en el plan de puesta en valor del patrimonio del conjunto histórico y artístico San Juan y San Francisco, que tiene como objetivo propiciar el primer lavado de cara profundo de la biblioteca Montiano Placeres, que actualmente mantiene inhabilitados algunos espacios de manera preventiva, así como mejorar la seguridad de sus trabajadores y usuarios.

Y es que la falta de mantenimiento durante sus 27 años de actividad han pasado factura al edificio, teniendo las filtraciones de agua cuando llueve, lo que ha provocado el deterioro de maderas y ventanas, uno de sus principales problemas. «Con este proyecto perseguimos dos metas. Por un lado, recuperar una casa histórica del municipio al tratarse de un patrimonio de alto valor y, por el otro, ofrecer un servicio en condiciones a la población», remarca el concejal del área.

Entre las mejoras, destaca la puesta a punto de los baños, la renovación del equipamiento y la señalética para que cada instancia cuente con su rótulo identificativo. También se cubrirá la zona de la terraza -que es una de las zonas que permanece cerrada al público, junto al balcón- con la colocación de tres pérgolas con una lona para que genere sombra. «De esta manera recuperaremos el patio para el desarrollo de actividades, como las realizadas por los clubes de lectura, que ya se llevaban a cabo anteriormente», indica Juan Martel.

El dañado muro exterior también será arreglado, así como la fachada y la cubierta (con impermeabilización incluida). Se pintará el exterior una vez se arreglen las grietas y se rehabilitará la superficie. Además, destaca la instalación de un ascensor que conectará las tres plantas y que será una de las principales medidas de cara a la eliminación de las barreras arquitectónicas. «Uno de los puntos claves de esta actuación es el de hacer la de Montiano Placeres una biblioteca accesible para todos, ya no solo para las personas con movilidad reducida, sino también para la gente mayor que, afortunadamente, cada vez es más asidua a las bibliotecas», destaca el edil.

El Consistorio espera tener los trabajos terminados, cuya ejecución se alargará entre cinco y seis meses, para finales del presente año. Y ya que las obras obligarán a tener cerrado el inmueble, la concejalía busca espacios alternativos como colegios para habilitar salas de estudio que puedan paliar esta clausura temporal, cuyas molestias serán inevitables pero que permitirá la conversión de la biblioteca de San Juan en un espacio accesible y seguro.