Personal del centro de El Pino teme por sus puestos de trabajo
Los 47 trabajadores fueron contratados por 40 horas semanales pese a que en el concurso que en 2010 ganó ICOT, la empresa concesionaria, se fijaba que debían ser por 35 horas. Según denuncia el comité de empresa, como el Cabildo redacta ahora los pliegos para sacar otra vez a concurso el servicio, ha pedido a ICOT que regularice esos contratos, una medida que, asegura, pone en riesgo sus empleos.
El comité de empresa que representa a los 47 trabajadores del centro sociosanitario El Pino, en la capital grancanaria, que gestiona ICOT mediante una concesión, reprocha al Cabildo que esté poniendo en riesgo sus puestos de trabajo por pretender que el servicio se ajuste ahora a lo que quiere que figure en el pliego de condiciones que está redactando y con el que sacará otra vez a concurso este contrato. El que está en vigor es de 2010. Este martes aprovecharon que vino al centro a inaugurar el belén Blanca Méndez, gerente del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria, organismo del que depende esta unidad, para hacerle llegar esta inquietud y malestar con una poesía.
Según explica la presidenta de este comité, Lorena Moreno, ICOT contrató a todo el personal que lleva la antigua clínica de El Pino por 40 horas semanales, pese a que en el pliego que en su día ganó ICOT se estipulaba que los contratos debían ser de 35 horas. Como ahora está en plena fase de redacción de los pliegos del nuevo concurso, detalla Moreno, el Cabildo ha solicitado a ICOT que regularice la situación laboral del personal para adaptar sus contratos a lo que figura en el pliego, de tal forma que no haya desajustes a la hora de que una nueva e hipotética compañía asuma el servicio.
El problema estriba en que ese reajuste pasa por dos vías: por que lo acepten los trabajadores de forma voluntaria, opción poco probable dado que, según se queja Moreno, se verían muy mermados sus ya de por sí bajos salarios, o por que la propia empresa, ICOT, ponga en marcha un ERE y despida a parte de los trabajadores.
El usuario pierde.
Además, se queja Lorena Moreno de que esta medida no solo afecta al personal, sino también y, sobre todo, a los 448 usuarios que atienden en El Pino, que verán ahora reducidas las horas en las que les veían psicólogos, fisioterapeutas, trabajadores sociales o los auxiliares. No entiende cómo «el Cabildo pretende adaptar el servicio a las necesidades del pliego y no al revés». Por eso, han pedido una reunión con Méndez. Si no, lo intentarán con la consejera, Carmen Luz Vargas. Y no descartan movilizarse.
