Mogán publica el reglamento que protege las playas de los vertidos
Mogán cuenta por primera vez con un reglamento regulador de vertidos a la red de alcantarillado. El documento definitivo, publicado en el BOP del pasado viernes, tiene por misión el control de las aguas residuales domésticas, urbanas e industriales e impedir que llegue contaminación a las playas.Gabriel Suárez / Mogán
Defendido por el gobierno municipal (Ciuca-PSOE) como la herramienta más eficaz para comenzar a poner solución a los vertidos incontrolados, el nuevo reglamento regulador del uso del alcantarillado de Mogán, establece las condiciones a las que deberán adecuarse los vertidos de aguas residuales procedentes de las instalaciones domésticas, urbanas e industriales, con el fin de proteger el alcantarillado, los recursos hidráulicos y por tanto el medio ambiente y la salud de las personas, y evitar en especial los perjuicios al litoral turístico del municipio.
El documento definitivo, publicado en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) del pasado 4 de agosto, lo componen 52 artículos y varios anexos, destacando una lista de 61 productos tóxicos que están totalmente prohibido verter a la red de saneamiento.
Todo usuario que utilice la red de alcantarillado cuya previsión de vertidos no se considere como de carácter exclusivamente doméstico, y cuyo consumo de agua provenga, bien de una fuente propia o del abastecimiento municipal, deberá presentar solicitud de vertido.
El Consistorio podrá requerir un análisis del vertido, realizado por un laboratorio homologado, cuando lo considere oportuno y necesario para su mejor control. Para las acometidas existentes sin autorización de vertido, el usuario dispondrá de dos meses a partir del requerimiento del Ayuntamiento que le inste a presentar la solicitud de vertido.
El plazo máximo para resolver las solicitudes de autorización de vertido que se formulen por los interesados será de tres meses, y podrá establecer limitaciones, como reducir el volumen de vertido si sobrepasa la capacidad de la planta depuradora.
Asimismo, podrá exigir la instalación de medidores de caudal y otros instrumentos y medidas de control de contaminación, en los casos en que no exista fiabilidad respecto a los datos.
Los costes de las operaciones a que den lugar los accidentes que ocasionen situaciones de emergencia o peligro, así como los de limpieza, deberán ser abonados por el causante, con independencia de otras responsabilidades.