Otra línea de alta tensión incluye 17 torretas en San Bartolomé de Tirajana
El tendido propuesto por REE tiene 5.233 metros aéreos y 5.071 bajo tierra en los dos extremos | La altura de los apoyos es de entre 46,5 y 24,4 metros
La Dirección General de Energía del Gobierno de Canarias somete a información pública la solicitud de autorización administrativa y declaración de utilidad pública de una nueva línea de alta tensión de transporte de energía eléctrica, con una longitud de 10.304 metros en total, que transcurrirá íntegramente por el municipio de San Bartolomé de Tirajana.
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Esta línea aérea y subterránea es promovida por el operador del sistema, Red Eléctrica de España (REE), para unir las subestaciones de Santa Águeda y El Tablero 2, figura en el Plan de Desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica 2021-2026 que está en vigor y el presupuesto de construcción se estima en casi 4,64 millones de euros.
Poco menos de la mitad del trazado de este tendido eléctrico, en concreto 5.071 metros, discurrirán bajo tierra y los 5.233 metros restantes serán aéreos y estarán sostenidos por 17 torretas de nueva construcción.
La altura de las torretas oscila entre un máximo de 46,5 metros (dos de ellas) y un mínimo de 24,4 metros (la primera de las 17), pero la mayoría son de distintos tamaños. El vano (la distancia entre un apoyo y el siguiente) llega a una longitud máxima de 534,74 metros entre las torretas número 3 y 4 y tiene una distancia mínima de 81,55 metros entre los apoyos 7 y 8.
Trazado en tres tramos
El trazado de la futura línea que figura en la documentación es subterráneo al salir de la subestación de Santa Águeda, durante los primeros 167 metros de su recorrido, para salir al aire poco después y a lo largo de los citados 5.233 metros hasta volver a enterrarse una vez superados los 17 apoyos y a lo largo de otros 4.619 metros hasta la conexión final con la subestación de El Tablero 2.
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El trazado subterráneo final de la línea propuesta por el transportista eléctrico discurrirá por un túnel bajo el ramal que une la carretera GC-500 con la autovía GC-1, varios tramos de la calle Mar de Azor, la avenida Unión Europea (incluyendo un tramo por el carril bici paralelo a la acera inferior de esta vía) y el barranco de La Tabaquera, bordeando a continuación por el norte la rotonda en la que confluyen la avenidas de la Unión Europea y de Cristóbal Colón y la calle Doctor Agustín Millares Carlo.
Dentro de ese tramo subterráneo final la línea seguirá por varios tramos de esta última calle, hasta alcanzar la rotonda en la que confluyen los ramales de incorporación y salida de la autovía GC-1, y tomará entonces la avenida Francisco Vega Monroy, las calles Chile y Cartago.
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La relación de bienes y derechos afectados por esta línea eléctrica y sus accesos incluye terrenos de 52 parcelas catastrales diferentes que pertenecen a 62 propietarios. Dos parcelas se localizan en el primer tramo subterráneo, 35 están en el tramo aéreo y las otras 15 están en segundo tramo bajo tierra.
El INTA condiciona el trazado
La alternativa seleccionada para el trazado de la línea es resultado, entre otros condicionantes, de que en el pasillo previsto en el Plan Territorial Especial de corredores eléctricos para enlazar las subestaciones de Santa Águeda y El Tablero, y que, a priori, podría parecer el más indicado para la instalación, existen instalaciones cuyas servidumbres condicionan su empleo del pasillo diseñado, como las del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA).
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