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Será condenado de conformidad el lunes por la Audiencia Provincial de Las Palmas a una pena de ocho años y diez meses de prisiónUn vecino de Arrecife -de 36 años y nacionalidad colombiana- reconocerá ante el Tribunal haber utilizado internet para abusar de tres menores de edad y descargarse una gran cantidad de archivos pedófilos, por lo que será condenado de conformidad a una pena de ocho años y diez meses de prisión. El procesado será juzgado el lunes por la Sección Primera y asumirá las penas planteadas por el Ministerio Fiscal que, además, comprenden la libertad vigilada, prohibición de trabajar con menores, acercarse y comunicarse con las víctimas, participar en programas de educación sexual para pedófilos y pagar 2.000, 15.000 y 30.000 euros a cada una de los niños sobre los que cometió los abusos.
Según el Ministerio Público, Y.J.J.M. el último semestre de 2019, mantuvo conversaciones de índole sexual desde móvil con un menor de 12 años. Le llegó a enviar una fotografía en la que se mostraba desnudo, enseñando sus partes y un vídeo en el que se masturbaba. Con el tiempo, convenció al niño para mantener «varios encuentros sexuales» hasta que el mismo cumplió los 13 años de edad. Dichos actos tuvieron lugar en el domicilio del procesado en Arrecife y en un descampado de Playa Honda.
De la misma forma y en la misma época, Y.J.J.M. mantuvo hasta cuatro encuentros sexuales con un menor de edad, valiéndose para ello de la confianza existente entre ambos «por tener el procesado una relación de amistad de más de 20 años y de cercanía con la familia del menor». Incluso, el acusado se encargaba «en varias ocasiones del cuidado del menor de edad», iniciándose dichas relaciones sexuales cuando el niño tenía tan sólo 5 años. «Dichos encuentros sexuales tuvieron lugar en las escaleras y en el ascensor del domicilio del menor [...] siempre aprovechando que se encontraban solos y siendo plenamente consciente de la situación de desventaja en la que se encontraba» el niño «atendiendo a su constitución física y grado de madurez», apunta la Fiscalía Provincial de Las Palmas.
Finalmente, el procesado usó la red social Instagram para contactar con un adolescente de 15 años de edad, «llegando a enviarle una fotografía en la que se mostraba desnudo, enseñando su pene y un vídeo en el que aparecía completamente desnudo, masturbándose». La víctima no accedió a «conocer al procesado en persona, a pesar de las repetidas proposiciones realizadas por este último».
Tras ser detenido, en un registro efectuado en su vivienda, la Policía Nacional encontró más de mil archivos fotográficos y de vídeo, en los que aparecen menores de edad en actitud y comportamientos sexuales explícitos de todo tipo.
El acusado reconoció los hechos, colaboró desde el primer momento con la investigación y será condenado por un total de siete delitos.
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