Este pregón fue una fiesta de la normalidad
Las Palmas de Gran canaria ·
Los carnavales arrancan en Santa Catalina con un pregón musical de base discotequera y muchas dosis de fiesta. Los Salvapantallas animaron la pista de baile
Dijeron que llevaban veinte años celebrando fiestas, y que eran unos fiesteros. Y se definieron como especialistas en celebraciones. Fieles a esta concepción propia, Los Salvapantallas convirtieron anoche el escenario de Santa Catalina, y la pista de la discoteca Studio 54, en un concierto. El pregón con que se inició el carnaval de Las Palmas de Gran Canaria fue un popurrí, una concatenación de canciones que pusieron a prueba las caderas y las dosis de ritmo de los asistentes al primer acto de las carnestolendas. Era complicado resistirse al ritmo de canciones como 'Celebration', 'Funky Town' o 'That's the Way (I Like It)', entre otras.
Desde el comienzo, Nacho Rivas (vocalista del grupo), Daniel Delgado (batería), Alex Labao (guitarrista) y David Campodarve (bajista) dejaron claro que iban a imprimir su propio ritmo al arranque del carnaval más movido. «La música será la protagonista en este evento porque es así como mejor nos comunicamos, y porque esto de hablar en público como que...», bromeaba Delgado.
Su invitación a la fiesta también sirvió para recordar la raigambre de la fiesta en la sociedad canaria, no en vano «se cumplen 47 años desde que Manolo García y algunos vecinos de La Isleta lo recuperaron después del Franquismo, sino también porque se cumplen 25 años desde la celebración de la primera gala drag queen».
Tras dos años tristes, en que las relaciones personales y las interacciones sociales quedaron malheridas por la irrupción del coronavirus en nuestras vidas, el carnaval de las discotecas y la movida quiso recuperar, con Los Salvapantallas, aquellas ganas de vivir. En un remedo de los felices años 20 -aquel periodo expansivo tras el drama de la Primera Guerra Mundial- el carnaval nos descubre ahora que la normalidad era la fiesta.
«Será un carnaval especial porque volvemos a disfrutarlo como más nos gusta, sin barreras, sobre todo, después de tiempos complicados que nos han separado forzosamente», dijo Labao.
La partitura, como el olvido, mostraron su capacidad terapéutica, como señaló Delgado al decir que «vamos a olvidar y retomar todo lo bueno gracias a lo que rodea la magia del carnaval, sus murgas, comparsas, candidatas, drags, batucadas…, volvemos a la calle para vivirlo de cerca con la gente que ama esta fiesta; además, este año, y más que nunca, con mucha música».
Hubo también una referencia velada a los vecinos que han rechazado la celebración de los conciertos de carnaval en el parque de Santa Catalina, obviando que estos ciudadanos están asistidos por una resolución judicial. «Aunque a algunos les pese, se desbordará la alegría y sonará música por todos los rincones, bailaremos sin parar desde la mañana hasta … la siguiente mañana. Nos convertiremos en una ciudad funky. Las Palmas de Gran Canaria será una 'funky town'».
Fue el único toque ácido de un pregón que destiló buen rollo con «las canciones que ponían nuestros padres en el tocadiscos a todo volumen y a quienes veíamos bailar como locos por los pasillos».
El tempo del pregón también guardaba compases para añurgarse. Los Salvapantallas recordaron todos aquellos nombres que hicieron del carnaval la fiesta que fue, como el Charlot (Santiago García), el compositor Sindo Saavedra, Juanito el pionero, Drag Mandrágora, La abuela del carnaval, el diseñador Fernando Méndez, Xayo y los recientemente fallecidos Arturo García (murguero), Ruymán Rodríguez (diseñador del cartel) y, de modo especial, el humorista Manolo Vieira, cuyo nombre desató una gran ovación en el parque.
Luego cada uno contó sus recuerdos del carnaval, una fiesta que se grita y que sobrevivirá, como resonó en la discoteca.
