A la cárcel por quebrantar una orden de alejamiento el mismo día que salió de prisión

Este vecino de Agaete había sido condenado en sentencia firme el 3 de julio de 2020, dictada por el Juzgado de Instrucción número 3 de Santa María de Guía, a una pena privativa de libertad, además de un año y cuatro meses de prohibición de aproximarse en un radio de 500 metros al domicilio, trabajo o cualquier lugar donde se encontrara su expareja sentimental, y de comunicarse con ella por cualquier medio posible. Por estos hechos, Sergio José Medina Ortega entró en prisión y salió del centro penitenciario el pasado viernes 11 de diciembre.

Pues nada más pisar la calle y entre ese mismo día 11 y el 12, «con pleno conocimiento de la condena impuesta y total desprecio al cumplimiento de la misma», sostiene la resolución judicial, envió a su expareja desde su propio teléfono móvil varios mensajes y audios, además de efectuarle numerosas llamadas.

La víctima dio cuenta de este quebrantamiento de la condena a las autoridades y el acusado fue detenido de inmediato por efectivos de la Guardia Civil cuando se encontraba en el municipio de Gáldar.

Fue puesto a disposición judicial y, tras una sentencia alcanzada de conformidad, ingresó nuevamente en prisión acusado por el antes referido delito de quebrantamiento de condena. Además de los seis meses y seis días que tendrá que permanecer en un centro penitenciario, el acusado deberá abonar las costas procesales.

Se da la circunstancia de que Sergio José Medina Ortega contaba con tres antecedentes penales. El 20 de mayo de 2019 fue condenado por el Juzgado de lo Penal número 5 de Las Palmas de Gran Canaria a seis meses de prisión y cuatro años de alejamiento por un delito de maltrato habitual. Por otra parte, el Juzgado de Instrucción de Santa María de Guía lo penó a un año y cuatro meses de alejamiento y 50 días de trabajos en beneficio de la comunidad por un delito de amenazas el pasado 3 de julio de 2020. Por último, el 5 de agosto de este año también fue condenado por el Juzgado de Instrucción número 1 de Santa María de Guía a cuatro meses de prisión por un delito de atentado.