El Gobierno ya estudia el caso de Marta para ver si pueden acogerse al Canarias Pro Hogar

Esta iniciativa se puso en marcha para atender, de una forma global, a las familias que se hallen o estén próximas a hallarse en situación de desahucio o de lanzamiento. No es el caso de los padres de Marta, Aridañy Santana y Cathaysa Sánchez, pero a ellos sí les urge una vivienda adaptada a las especiales necesidades de su hija, que tiene una discapacidad reconocida del 87% y un grado 3 de dependencia.

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Este programa es el mismo por el que se le buscó una solución habitacional a la familia de Hugo, el joven tinerfeño que se quedó tetrapléjico tras un accidente en el mar. El Canarias Pro Hogar permitirá abonarle a esta familia un alquiler en una vivienda adaptada durante cinco años.

La de Marta reside en una vivienda alquilada en Vecindario que está en buenas condiciones si no fuera por las necesidades especiales que tiene la niña. Es un segundo piso en un bloque con ascensor, pero sus pasillos son tan estrechos que apenas cabe el carro ortopédico de Marta. De hecho, para que entre en el salón tuvieron que quitarle los bastidores a la puerta. Y el aseo no cuenta con plato de ducha, sino con bañera.