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Todo quedó en un susto, pero el chófer del camión pudo haber perdido la vida. Fue el 26 de junio, a primera hora. Bajaba cargado de millo para una explotación de ganado vacuno en García Ruiz, un diseminado de casas y fincas en las medianías de Telde y al tomar la curva más peligrosa del trazado, en plena pendiente, se salió de la vía y se despeñó por una empinada ladera. Volvió a nacer, pero a los vecinos y a las decenas de usuarios de esta estrecha carretera se les ha metido el miedo en el cuerpo. Han empezado a moverse para pedir al Cabildo, que es el responsable de esta vía, la GC-802, que les ensanche esa curva.
Ricardo Domínguez, propietario de una de las granjas de la zona, hizo ayer de portavoz en una visita que hicieron a la zona el alcalde, Juan Antonio Peña, y el concejal de Obras, Iván Sánchez. Les explicó que la solución al problema pasaría por abrir un poco más la curva y que para eso solo habría que ensancharla. «Conozco a los propietarios del suelo, tanto en un lado como en otro, y se han mostrado dispuestos a colaborar, por lo que no habría ni que expropiar», les informó.
Este empresario les reconoció que el Cabildo ha estado muy encima de los vecinos en estos días posteriores al accidente y que, de hecho, ya ha restablecido el tramo de valla-quitamiedos que el camión se llevó por delante, pero les explicó que no estaría de más que la solicitud de los vecinos de la zona y de los usuarios de esta carretera se viese respaldada por el Ayuntamiento de Telde. «Sé que el Cabildo está predispuesto a buscar una solución a este problema, pero cuantos más empujamos, mejor», les indicó.
Y la predisposición del nuevo gobierno local, según le apuntó Peña, es absoluta. «No nos vamos a limitar a decirle que la competencia no es nuestra», le dejó claro. Ahora queda definir la fórmula, si se opta por una declaración institucional que respalde la petición vecinal, por aprobar una moción plenaria o por servir de enlace con la institución insular.
El alcalde sí le avanzó que ha dado la orden para que cuanto antes se retiren o se trasladen de sitio varios contadores colocados recientemente por Aguas de Telde en plena curva, justo en un punto donde complica la maniobra a los vehículos de mayor tamaño y, por tanto, más largos.
Domínguez recalcó que, aparte de que la curva es muy cerrada, parte del lado de la calzada está tendida o inclinada justamente hacia la ladera, hacia la zona por la que se precipitó el camión. «En invierno nos la jugamos en este tramo, aunque vengas con un coche pequeño». Por eso, propone también que en el caso de que pueda acometerse la ampliación de la calzada, se contemple la construcción de un muro de contención que refuerce la estructura de la vía.
Calcula que son varios cientos los vecinos y usuarios que transitan por este llamado también Camino de García Ruiz, que enlaza la GC-803, la vía que conduce a La Gavia, con la GC-810, la que enlaza La Higuera Canaria por La Solana con San Roque.
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