Borrar
Vea la portada de CANARIAS7 de este viernes 29 de marzo
Una imagen de 'Seis días corrientes'.

Una comedia humanista con doble lectura

La cineasta Neus Ballús realiza en 'Seis días corrientes' un agudo retrato de una sociedad repleta de prejuicios, fusionando realidad y ficción en un filme premiado en festivales de peso

Jueves, 2 de diciembre 2021

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El pasado fin de semana se estrenaba la curiosa 'Espíritu sagrado', filmada con actores no profesionales, mientras este viernes entra en las cartelera 'Seis días corrientes', mezcla de realidad y ficción que se apoya en personajes reales, tres fontaneros y electricistas que se interpretan a sí mismos en la periferia de Barcelona. Durante una semana, las jornadas a los que alude el título del filme, un trabajador de origen marroquí es puesto a prueba para sustituir en la pequeña empresa a un veterano lampista que se jubila. La gesta no es fácil, ya que el choque con el otro compañero que se queda es continuo, empeñado en que no supere el periodo a examen por razones no profesionales.

Vídeo. Tráiler de 'Seis días corrientes'.

La sucesión de escenas cotidianas, cual Pepe Gotera y Otilio sofisticados, resultan divertidas, a pesar de ofrecer un retrato descarnado. El tono cinematográfico es agradable, aparentemente, porque lo que cuenta su directora en clave de comedia invita a la reflexión y en algunos momentos estremece, señalando la cantidad de prejuicios que asola nuestra sociedad y los diferentes roles sociales que la componen. Tercera película de Neus Ballús ('La plaga') con guion de su cosecha junto a Margarita Melgar, pseudónimo tras el que se encuentran Montse Ganges y Ana Sanz-Magallón.

«Siento la necesidad de filmar lo que veo ahora y aquí, a mi alrededor», defiende Ballús, cuyo padre es fontanero, razón por la cual ha recogido elementos de la realidad para reflejar todo tipo de historias que ha escuchado siempre en casa. Situaciones singulares, prejuicios, problemas y conflictos de toda índole. 'Seis días corrientes', rodada con instinto y fotogenia, entrañable y perspicaz, surge tras tres años de intenso trabajo con gente real. Extractos de su vivir cada día conforman una película que hace referencia a un mundo actual donde conviven personas de orígenes y etnias dispares con diferentes punto de vista a la hora de enfrentarse a su existencia.

La directora Neus Ballús, que debutó con 'La plaga' (2013).
La directora Neus Ballús, que debutó con 'La plaga' (2013).

El entendimiento entre los seres humanos es la base de la propuesta, con Barcelona, una ciudad multicultural, como escenario. Moha, Valero y Pep, contratados por una pequeña empresa de fontanería, son los protagonistas. Los dos primeros -Mohamed Mellali y Valero Escolar- se colocaban por primera vez frente a una cámara y ya han recibido el premio a la mejor interpretación masculina ex aequo en el Festival de Locarno (además del premio Europa Cinemas Label y una mención especial del jurado joven independiente). Su naturalidad es un acierto, desvelando algunos pensamientos políticamente incorrectos.

Seleccionada también en BFI London Film Festival, tras su paso por Toronto y SEMINCI -Espiga de Plata y Premio del Público-, 'Seis días corrientes' puede entenderse como una comedia atípica, con varias capas de lectura. La sonrisa del espectador puede helarse, ya que el humor suaviza el racismo y los juegos de poder que envuelven a los protagonistas. Ballús imagina y recoge retazos de la realidad para señalar otros mundos que están en éste, decorados reales que a veces desconocemos u ocultamos conscientemente, porque no entran en nuestra realidad modelada. Hay quien ha citado el programa de televisión 'El jefe infiltrado' como graciosa referencia, pero donde hay manipulación del guion y una discutible sensibilidad en pos del espectáculo aquí hay algunos momentos excelsos y mucha verdad, aunque pese en nuestras conciencias y nos «echemos unas risas». Queda claro el mensaje.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios