El Pérez Galdós se viste de revolución

Un equipo formado por 33 técnicos están trabajando durante cuatro días las 24 horas para que el teatro Pérez Galdós se engalane con aires de revolución. La Francia más reivindicativa del siglo XIX llega al coliseo grancanario con el estreno este viernes del musical Los Miserables. Ayer se vivía un día frenético en el Pérez Galdós. Sesenta operarios, contando los de la compañía Stage Entertainment y los contratados en la Isla, iban y venían de un sitio a otro por todo el recinto del barrio de Triana para que todo esté a punto el viernes por la noche, donde a partir de las 20.00 horas se estrenará el musical Los Miserables. Se trata de una oportunidad única puesto que es la primera vez que esta obra maestra basada en el libro de Víctor Hugo visita la Isla y por ello, el jefe técnico del espectáculo, Francisco Grande, se mostraba ayer bastante ilusionado con este estreno: «Hemos traído todo el material desde Tenerife en once trailers y estaremos durante cuatro días con un intenso trabajo de montaje», comentaba desde el patio de butacas del teatro. No sólo se trata de encajar las piezas del decorado en el escenario, sino «también hay que tener en cuenta que traemos una gran cantidad de material de iluminación, sonido, vestuario, etcétera, para ofrecer al público una obra que nunca olvidará», relató. Desde el mismo día cinco de enero, fecha en la que se puso en escena la última función en el auditorio Adán Martín de Tenerife, el equipo de la compañía comenzó a desmontar el decorado para trasladarlo dentro de camiones y por barco hasta Gran Canaria, donde les esperaba una avanzadilla de cinco personas. En ese momento, se abrían las puertas del Pérez Galdós que ha visto como en pocas horas, se ha llenado de magia con olor a revolución, el entorno donde se desarrolla esta obra que lleva ya 28 años en cartelera y que ha recorrido más de 42 países. Según Francisco Grande, la diferencia más notable entre Los Miserables y cualquier otro musical que ha visitado Gran Canaria es que «la técnica está muy presente pero no es del todo notable puesto que se disimula bastante el gran despliegue que se realiza en cada función y eso es algo muy bonito», relató. Un musical que cuenta con tecnología de última generación pero que mantiene en todo momento el sabor del siglo XIX con un entorno en el que predominan los tonos sepias, las luces y sombras que dan un aire íntimo y muy cercano con el espectador. En este caso, el equipo de Stage Entertainment cuenta con la dificultad de espacio que tiene el Pérez Galdós con respecto a otras plazas que ya han visitado en la gira como, por ejemplo, el auditorio de Sevilla, algo que «complica un poco las labores de montaje, pero para nosotros no es una tarea difícil ni mucho menos, y los asistentes verán de la misma manera esta producción», señaló el jefe técnico. Algo que destacó Francisco Grande durante el proceso de montaje es que «viendo el recinto, tengo que decir que el público de Gran Canaria tendrá mucha suerte de que Los Miserables esté tan cerca de sus casas ya que es el musical por excelencia y hay que aprovechar que viene a la Isla para verlo», dijo. «Además, el hecho de tener como escenario este teatro a la italiana es un lujo para vosotros. Se verá un espectáculo muy cercano al público, que degustará la obra a pocos metros de los artistas». Los Miserables, que cuenta con cuarenta escenas diferentes, estará en cartelera en la Isla hasta el próximo día dos de febrero.

Temas

• Musicales
• Las Palmas de Gran Canaria
• Teatro Pérez Galdós