El Gobierno fue advertido del "desajuste" que se avecinaba

Jueves, 16 de julio 2020, 21:49

Durante la reunión celebrada el 21 de julio de 2016, el comité asesor del Festival de Música de Canarias advirtió a la consejera Mariate Lorenzo y al coordinador Nino Díaz que la programación de la 32ª edición podría acarrear una caída en los ingresos, tal y como ha sucedido. Esta comisión fue reemplazada, casi al completo, el pasado mes de diciembre. José Luis Rivero Plasencia, director insular de Cultura del Cabildo de Tenerife, al igual que otros compañeros de este excomité asesor, mostró sus dudas sobre la viabilidad de la programación del 33º Festival de Música de Canarias, durante la reunión celebrada el 21 de julio de 2016, a cuya acta ha tenido acceso este periódico.

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Rivero expuso que la programación que les presentó en la reunión la consejera de Cultura Turismo y Deportes, Mariate Lorenzo, y el coordinador del Festival, Nino Díaz, «podría generar un desajuste en los ingresos en taquilla». Apuntó que tras «probar» con el nuevo modelo diseñado para la 33ª edición, si el resultado económico era negativo, habría que «dar marcha atrás» y volver a la programación tradicional. Los críticos con el plan presentado por Lorenzo y Díaz, la mayoría de los integrantes del comité asesor, según refleja el acta, tenían razón con sus predicciones. El pasado viernes, la consejera dio a conocer una cifra de ingresos que se quedó 232.008 euros por debajo de las previsiones incluidas dentro del presupuesto total, que asciende a 1.953.175 euros. Jerónimo Saavedra, actual Diputado del Común, y Juan Mendoza, exdirector del Festival y exgerente de la Filarmónica de Gran Canaria, fueron muy críticos. Saavedra resaltó la ausencia de orquesta sinfónicas internacionales de relevancia en una programación que contó con la misma aportación económica del Gobierno de Canarias 1,3 millones de euros que en la edición anterior. Significó la ausencia de programas atractivos dentro de los abonos para atraer al público, ya que, desde su punto de vista, se estaba «ante una bajada de varios escalones en la calidad del festival». Javier Martín Carbajal afirmó también que resultaba «evidente» que la calidad había disminuido y que lo programado no era del gusto del público del Festival. Saavedra adelantó que «con cuartetos no se va a captar al público joven», tal y como aseguró el coordinador Nino Díaz que se intentaba conseguir. Juan Mendoza compartió las observaciones del actual Diputado del Común y dio una valoración «negativa» a la programación. Explicó que se corría el peligro de «espantar» al público habitual. Esta previsión se ha cumplido, ya que a pesar de programarse 34 conciertos más, apenas se han ganado 7.131 espectadores. Rosario Álvarez, por su parte, consideró que la programación de esta 32ª edición era «atractiva». Desde su punto de vista, el público habitual del Festival «estaba aburrido» y la nueva apuesta incluía una mayor «variedad». Consideró Álvarez también que hasta esta última edición se ha dado prioridad intérpretes frente al repertorio, cuando lo correcto es hacer lo contrario. Apreció una mayor preocupación en la programación elaborada por Nino Díaz por los «músicos y compositores canarios, así como por los latinoamericanos». Concluyó su intervención asegurando que los conciertos de las bandas de música de la capital grancanaria y de Santa Cruz de Tenerife «serán bien recibidos por el público». Su previsión no se cumplió. Tocaron en unos auditorios capitalinos casi vacíos.

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