Cuando se duda en cómo actuar
A la mesa del comité de ética asistencial del Materno-Insular llegan casos, sobre todo, de Pediatría, Neurología y de la UMI. EN 2015 valoró cuatro casos. Sus componentes solo asesoran, sus informes no son vinculantes pero colaboran en resolver el conflicto de médicos, pacientes y familiares en situaciones clínicas complejas. Una familia que exige que no se continúe con el esfuerzo terapéutico a un paciente a pesar de que su estado es terminal y que entra en conflicto con la decisión clínica del equipo médico, o cuando a un profesional se le plantea una cuestión ética en la decisión clínica de si seguir hidratando y alimentando a un paciente en estado vegetativo o abandonar las terapias invasivas para saber hasta donde se alarga su vida puesto que la ciencia lo permite, o conflictos éticos a la hora de afrontar terapias que van en contra de una religión... En la práctica asistencial se de dan multitud de casos que pueden provocar en el profesional, en el paciente y en la familia un problema ético y que necesitan de asesoramiento. En los cuatro hospitales universitarios canarios principales, en el Doctor Negrín y en el Complejo Materno-Insular en Gran Canaria y el Universitario de Canarias y en La Candelaria en Tenerife, disponen de comités éticos asistenciales en los que se abordan estas cuestiones en las que pueden entrar en conflicto los deseos del paciente o familiar con los de su equipo médico. En estos conflictos normalmente entra en discusión esa frase de «si todo lo médicamente posible es éticamente correcto» y uno de los que más se plantean es la autonomía y opinión del paciente frente a la decisión clínica, asegura Octavio Ramírez, jefe de sección de Ginecología del Hospital Universitario Materno-Infantil y presidente del Comité de ética asistencial del Complejo Hospitalario Universitario Insular Materno Infantil de Canarias (CHUIMI). Estos problemas éticos surgidos de la práctica hospitalaria pueden llegar al comité de ética, en el que están representados todos los estamentos incluido un abogado y en breve, un representante de los pacientes, y «desde donde aportaremos orientación y asesoramiento en los procesos de decisión clínica en las situaciones en que planteen problemas éticos entre el personal sanitario, pacientes y familiares. «Cuando se plantea un caso al comité antes de tratarlo tratamos de adquirir toda la información posible, de tal manera que no tengamos ninguna dudad desde el punto de vista médico-clinico ni ético ni religioso», destaca Ramírez. «Las especialidades que más se nos presentan son de Pediatría, Neurología y de la UMI», apunta Mercedes Martín, enfermera y coordinadora del área de Secretaría del Comité de Ética del Complejo Materno-Insular. Durante el pasado año se le trasladaron «cuatro casos, pero este año, solo uno», concreta Ramírez. «Desgraciadamente, no acabamos de calar entre los profesionales médicos», matiza. «Las opiniones de la comisión se transcriben en la historia clínica y nuestras decisiones no tienen fuerza vinculante», dice Martín.
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