Araujo, ante su enésima oportunidad

Vuelta al ruedo de Sergio Araujo. El próximo lunes, con motivo de la visita de la UD al Deportivo de La Coruña. El argentino será titular por la baja del sancionado Willian José. Y en Galicia pretende ganar crédito ahora que purga uno de sus peores momentos desde que llegó al club.

No será un partido cualquiera para la UD, que puede sellar, casi de manera matemática, su permanencia en Primera si ganar en Riazor. Y la cita también reúne una importancia capital para Sergio Araujo, héroe en tiempos muy lejanos y ahora convertido en carne de banquillo y censuras públicas a cuenta de su vida indisciplinada. El ariete argentino, que apareció por última vez en el once el pasado 17 de enero frente al Atlético de Madrid y no marca un gol desde diciembre, tendrá una oportunidad de reivindicarse a ojos de todos por la ausencia obligada de su compañero Willian José, quien guardará descanso obligado al cumplir ciclo de amonestaciones. Salvo sorpresa, Quique Setién apostará por él en el frente ofensivo frente al Deportivo, en lo que se anuncia como una oportunidad, puede que hasta definitiva, para evaluar su utilidad en el grupo. Pese a que desde el presidente al entrenador, pasando por sus propios compañeros, se ha hecho bandera de una defensa cerrada de Araujo, al que consideran capacitado para recobrar su nivel, lo cierto es que las especulaciones en torno a su futuro lejos del club han ido engordando con el paso del tiempo. El propio jugador ha pedido varias veces que le vendan esgrimiendo ofertas de otros equipos que, no obstante, nunca se han plasmado en propuestas formales.Por si fuera poco, el pasado 22 de febrero saltó a la luz que, junto a Nauzet Alemán, salió de juerga teniendo al día siguiente un entrenamiento que no realizó al sentirse indispuesto. Esa falta grave la expió con un expediente y una convocatoria a Eibar en la que viajó para quedarse en la grada.

Desde que reapareció, y con pitos de la propia afición de la UD, ha estado gafado. Sin suerte, sin estrella. El pasado sábado, frente al Valencia, y tras magistral pase de Willian José, tampoco acertó en un mano a mano con el portero rival. Pero el fútbol siempre da la posibilidad de una revancha y a Araujo se le abren los cielos con lo que aguarda la jornada que se viene encima. Minutos y posibilidades de redención. Que no es poco con la que le está cayendo.

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