Eulis Báez, rey y corazón del Arena

El Herbalife Gran Canaria no falló en el Arena. Ya suma 15 victorias, de las cuales 11 las ha conseguido ante sus aficionados, en los 24 encuentros disputados en la competición doméstica. Unos números para poner la directa hacia el playoff por el título y recuperar crédito en las aspiraciones de afrontarlo como cabeza de serie. El MoraBanc Andorra demostró que su racha histórica no era casualidad y, merced a sus 13 triples, amenazó con asaltar la isla por segunda campaña seguida, pero el capitán claretiano Eulis Báez, autor de 20 puntos en la segunda parte, en un recital de liderazgo y oficio, resultó determinante para volver a sonreír tras ser arrollado ante el Baskonia en la pasada fecha liguera. Tres acciones consecutivas de 2+1 y, a renglón seguido, un triple dinamitaron el encuentro.

Duelo de gallitos.

Seis puntos de Fischer y el buen ejercicio de intensidad en los dos aros de Rabaseda otorgaron la primera renta del duelo al Gran Canaria (8-5 a 5.35). Reaccionó el MoraBanc Andorra desde el exterior merced al acierto de los franceses Albicy y Sané y del esloveno Jaka Blazic (12-16 a 2.57). Un equipo en estado de gracia, que se presentó en la isla con siete victorias seguidas, con muchos jugadores capaces de sumar y que obligaba a Luis Casimiro a solicitar tiempo muerto tras convertir su cuarto triple.

El Herbalife Gran Canaria intensificó la defensa exterior y, con Mekel ya en la dirección y Balvin en la pintura, aguantó el pulso a la escuadra de Joan Peñarroya para empatar el compromiso a 18 puntos a falta de 50 segundos para la conclusión del primer cuarto. Los duelos individuales eran eléctricos, con sufrimiento para aprovechar cada acción y asumir el mando. Blazic, objeto de deseo claretiano en las últimas campañas, golpeó de nuevo desde la línea de 6,75 y, a renglón seguido, el rocoso Iverson aumentó la renta desde la línea de tiros libres (18-22), pero Seeley anotó sobre la bocina desde el centro del campo y a tabla para cerrar el acto (21-22).

Mekel, en un enfrentamiento precioso con Jaime Fernández, el jugador nacional mejor valorado en la presente campaña, dirigió y anotó en el arranque del segundo periodo, estando bien secundado por el argentino Brussino y el letón Pasecniks, para firmar un parcial de 11-6 (32-28 a 6.36).

Arreón amarillo.

Blazic, con su tercer triple, respondió, pero el Herbalife, que subió líneas y ofreció más clarividencia a la hora de circular el balón, estaba más enchufado que su rival (36-31 a 5.30), obligando al técnico visitante a frenar el arreón amarillo. 15 puntos en cinco minutos de juego del segundo acto.

Los pupilos de Casimiro se vaciaban en cada acción defensiva y en la lucha por controlar el rebote, asfixiando al MoraBanc Andorra, que sufría para encontrar buenos tiros, pero, al límite de la posesión, Fernández oxigenó a su equipo desde el exterior. Otro talento, Radicevic, respondió en un serio y sólido Granca.

Albicy y Shurna, ambos desde más allá de la frontera de los tres puntos, despertaron a un cuadro del Principado que ya sumaba nueve triples, tras un parcial de 3-10 (39-41 a 2.03). Confianza y acierto para recuperar la iniciativa. El plantel de Casimiro estaba tocado y Jelinek, con una penetración de mucho talento, aumentó la renta hasta los seis puntos, tras un parcial de 3-14 (39-45 a 52 segundos).

Pasecniks rompió la sequía amarilla, pero una falta técnica señalada a Casimiro por protestar una falta a Jelinek que considerada de ataque, propició que los de Peñarroya mantuvieran su botín (41-48).

Tras el paso por los vestuarios, los amarillos se pusieron el mono de trabajo ante un rival con tantos puntos y tremendamente equilibrado. Fischer, brillante, volvió a la pista y el capitán Báez convirtió desde el exterior para tomar ventaja (61-58). No podía fallar en el Arena en plena lucha por el playoff.

Fischer salvó un balón imposible y Oliver convirtió desde el exterior, mientras que Jankovic y Báez asumieron galones en un momento trabado (78-76).

El corazón de báez.

El ala-pívot dominicano, con 20 puntos en la segunda parte, lideró e impuso su oficio en la zona para dar la máxima renta al Herbalife (83-76 a 6.14). Peñarroya se desquició, recibió una falta técnica y Oliver alimentó la fe (84-76).

Los viejos rockeros estaban en su salsa. Otro triple de Báez y la clase de Oliver, bien secundado por Rabaseda, noquearon a un MoraBanc Andorra que no aguantó el pulso en el tramo final (91-80 a 3.49). Peñarroya intentó conectar a sus jugadores y lo logró tras un parcial de 0-6, lo que obligó a Luis Casimiro a recordar a los suyos que aún no estaba terminado el trabajo a poco más de dos minutos (91-86).

Fernández llevó el susto al Arena (92-88), pero Seeley, desde la línea de 6,75, y Báez, sobre la bocina de una posesión, despejaron el camino (99-95).

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