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«Apáñese con sus cabras, o multazo»

Martes, 21 de julio 2020, 15:20

El problema de José Ramón Martín Machín con sus cabras, en su día era un problema también del alcalde de Teguise, Oswaldo Betancort, pero ahora es solo suyo.

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En el año 2011, el alcalde habló con este ganadero de Soo y le pidió de buena voluntad que accediera a llevarse las cabras del núcleo de inconveniente de salubridad que tanto sus animales como el de otros cuatro ganaderos estaban generando a los vecinos y por los continuos requerimientos que Sanidad venía haciendo a las autoridades locales para que el ganado fuera retirado del núcleo urbano.

En aquel entonces había cuatro ganaderos en Soo con idéntico problema al de José Ramón y el Ayuntamiento construyó unos corrales a propósito, para llevarse las cabras del pueblo y dar salida definitiva al asunto.

En el caso de los otros cuatro ganaderos, el Ayuntamiento les permitió que trasladaran sus cabras a las nuevas naves construidas a propósito. Sin embargo José Ramón, accedió de buena voluntad a llevarse las suyas a una finca de su propiedad, mientras el Ayuntamiento le buscaba una salida mejor, al menos esto es lo que le dijo el alcalde de palabra, según explica el afectado.

Los años han ido pasado y a José Ramón nadie le ha dado una solución, con la paradoja de que el mismo Ayuntamiento que le pidió el favor de que se llevara las cabras a su finca ahora es quien le ha abierto expediente y le apercibe de que si nos desmantela el corral será sancionado con una multa que podría superar los 15.000 euros.

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Lógicamente, José Ramón Machín se siente engañado y más después de ver como el alcalde alardea en los medios de comunicación de haber resuelto el problema de las cabras de Soo. Lo curioso es que de las cuatro naves para cabras que el Ayuntamiento construyó, dos están vacías, este ganadero podría llevar allí sus cabras y el asunto quedaría resuelto, al menos de momento, mientras se busca una salida definitiva acogiéndose a la Ley del Suelo, que ya arbitra posibles soluciones, pero el Ayuntamiento no permite a José Ramón que lleve allí sus cabras.

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