Un aperitivo de lo que viene

A las ocho de la mañana de este viernes se activaba la alerta por lluvias decretada por la Dirección General de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias en Gran Canaria y Tenerife, pero las incidencias y las intensas lluvias tardaron en llegar a las islas centrales. Las primeras lluvias hicieron acto de presencia en El Hierro y La Gomera, con más de 40 litros por metro cuadrado. En la isla colombina se detectaron dos mangas marinas, un fenómeno poco usual pero que ya se captó el 29 de enero con la última borrasca a su paso por San Andrés y Sauces en La Palma.

Mientras, en el sur, este y oeste de Gran Canaria la lluvia llegaba de forma pausada y serena, sobre todo en las zonas del interior de la vertiente sur y oeste. De hecho, varias estaciones de la red de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en esas zonas superaron los 30 litros por metro cuadrado. Cuevas del Pinar tuvo el registro más alto rozando los 60 litros por metro cuadrado hasta las 22.00 horas. Acumulados que hacía años que no se veían en el interior de Mogán y San Bartolomé de Tirajana, pero que se quedaron cortos en comparación con los 70 litros por metro cuadrado en doce horas previstos.

Por la tarde, los chubascos ganaron intensidad especialmente en Gran Canaria y Tenerife provocando pequeñas incidencias como problemas con el alcantarillado en Agüimes y Santa Lucía de Tirajana y con el tendido eléctrico en Mogán. La caída de un muro cortó el tráfico a la altura del kilómetro 22 en la GC-100, entre Ingenio y Agüimes y se procedió al cierre momentáneo del acceso a Cercados de Araña y presa de Chira por desprendimiento. A última hora se abrió la vía. Al cierre de esta edición se vieron afectadas más vías de los municipios de Agüimes, Telde e Ingenio.

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